Arte

Opinión | Bajo la piel del miedo, de Jonathan Glazer


Por Gustavo Ambrosio /@guskubrick | Marzo, 2015

Jonathan Glazer coescribe, con Walter Campbell, la adaptación de la novela de Michel Faber, una historia cercana a la ciencia ficción de una raza extraterrestre que usa la piel de humanos para atraerlos y posteriormente devorarlos. Sin embargo, ¿qué pasa cuando llevas demasiado tiempo puesta una piel que no es la tuya, ni siquiera la de tu propia raza, y descubres que tu alimento es más que carne, huesos y piel?

El guión del filme es pausado, con imágenes simbólicas y con pocos diálogos. La imagen es privilegiada, pero se nota una fuerza construida desde el guión. Las escenas están insertadas en el momento adecuado y le dan un carácter orgánico, que muestran una fluidez en el desarrollo del personaje principal.

Mientras vemos esa caza que hacen de los seres humanos, a ese señuelo que es esa bella extraterrestre con la piel de Scarlett Johansson, vemos un sin número de temas humanos que pasan y se impregnan. Desde la falsa imagen, la terrible deshumanización de la raza hambrienta, el rechazo a lo diferente, el amor y finalmente la naturaleza como algo más allá del hombre y la tierra misma. La naturaleza de las cosas.

La fotografía de Daniel Landin (fotógrafo de videos de Björk) es magnética, poética, estética y que encuentra en cada escena una estética diferente para poder romper lo “normal” con la “otredad”. Magnífico logro visual y que junto con al música de Mica Levi, dan un tono escalofriante y electrizante a la película.

Pero sin duda, el ojo visionario de Glatzer es el principal motor de vida de este proyecto. La ciencia ficción nunca había tocado estas cuotas de reflexión sin necesidad de recurrir a los efectos visuales burdos que suelen usar las megaproducciones. Dice mucho con poco. Digno de un relato de Ray Bradbury.

Bajo la piel es un filme metafórico y envolvente que produce ganas de mirarse al espejo, pellizcarse la piel y preguntarse qué hay debajo de ella.

Foto: Patheos.